Con una presentación sobre la contaminación acústica y sus efectos en las personas, la Prevencionista de Riesgos y docente de INACAP, Hilcia Valdebenito Jara, explicó a los estudiantes y público asistente dando inicio al ABP «La contaminación Acústica como Problema en la Comunidad Educativa CHB-Iquique», dónde los estudiantes de los I medios A, B y D y coordinadores docentes de ABP, oficializan el trabajo que han desarrollado durante semanas, en la búsqueda de una solución a esta problemática, a través de mediciones de ruido, encuestas e investigación.
La contaminación atmosférica no es la única que tiene efectos perjudiciales para los seres vivos del planeta. La contaminación acústica, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es uno de los factores ambientales que provoca más problemas de salud. Se debe considerar que no todo sonido es considerado contaminación sonora; un ruido es cualquier sonido superior a 65 decibelios (dB), dicho ruido se vuelve dañino si supera los 75 dB y doloroso a partir de los 120 db.
La contaminación sonora, representa un problema ambiental para la comunidad educativa por las afectaciones a la salud que pueden ocasionar, y los efectos que puedan tener los estudiantes, con o sin necesidades educativas especiales, y los profesores en su rendimiento cognitivo, concentración-atención, trauma acústico, estado anímico, prácticas pedagógicas, problemas psicológicos y fisiológicos, entorpeciendo la fluidez del proceso de enseñanza aprendizaje.
Estos efectos ocasionados por los diversos tipos de ruidos generados dentro y fuera del aula, provenientes arribos de profesores y estudiantes hablando, en algunos casos de forma ensordecedora, lo que puede provocar que los alumnos no presten atención; conversaciones en los pasillos, silbatos, deportes, clases con música o todo volumen, talleres, etc. A estas hay que sumarles los ruidos externos: transporte, voces de transeúntes. Todo esto hace que el ruido en el colegio sea constante y con altos niveles sonoros.
El proyecto inicia con una etapa de investigación exhaustiva, en la que los estudiantes recopilaron datos sobre los niveles de ruido en diferentes áreas del Colegio y realizaronmediciones con dispositivos especializados. Los resultados revelaron áreas problemáticas donde los niveles de ruido superan los estándares aceptables.
Con el apoyo de sus profesores y expertos externos, los estudiantes analizan las posibles fuentes de ruido y diseñan estrategias para reducir la contaminación acústica en el colegio. Los estudiantes han demostrado su compromiso con la resolución de problemas del mundo real y han adquirido habilidades valiosas que les servirán en su futuro académico y profesional.
Se busca que los estudiantes generen soluciones concretas para los desafíos que enfrenta la comunidad, en el aspecto de contaminación acústica ya que el ruido excesivo y constante, más allá de los lógicos efectos negativos sobre la audición (tinnitus o sordera), puede provocar otro tipo de problemas (psicopatológicos, psicológicos, trastornos en el sueño, conducta, memoria y atención) en las personas, por lo que este proyecto tendría un gran alcance e impacto en la comunidad educativa Hispano Británico.